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El béisbol no perdona, pero también da segundas oportunidades. Taijuan Walker, uno de los lanzadores más criticados del 2024 en Philadelphia, volvió al montículo como abridor este jueves y respondió con silencio. Seis entradas en blanco, apenas tres hits permitidos y una actuación que pasó de los abucheos en su presentación a una ovación cerrada al salir del sexto episodio.
Lo más impactante no fue solo el resultado —una victoria 3-1 sobre los Rockies que cerró una barrida de tres juegos en casa—, sino la narrativa: Walker reemplazó al lesionado Ranger Suárez y se reivindicó ante la misma afición que lo había puesto en duda.
Redención desde la lomita
En su primera apertura de la temporada, Walker se mostró eficiente y enfocado, sacando outs con inteligencia y sin necesidad de dominar con velocidad. No dio boletos y ponchó a cuatro, manejando los innings como un veterano en control total. ¿Casualidad o señal de que su nuevo rol puede ser más que temporal? Dentro del clubhouse, hay quienes creen que si sigue así, podría ganarse un lugar estable en la rotación.
Schwarber sigue encendido
Kyle Schwarber se ha convertido en el motor ofensivo de este inicio de campaña. Conectó su cuarto cuadrangular en seis juegos, extendiendo su racha de hits a seis partidos consecutivos —la más larga para iniciar una temporada en toda su carrera. Un dato que, si bien pasa desapercibido en el boxscore, habla del enfoque con el que el cañonero ha regresado este año.
Y fue precisamente un error del jardinero Mickey Moniak, ex Phillie, que permitió que Schwarber abriera el quinto inning embasándose. Esa jugada se convirtió en la llave del partido, ya que luego llegaría un doble impulsador de Bryce Harper para romper el empate a cero.
Producción silenciosa, pero efectiva
J.T. Realmuto también tuvo una noche destacada: tres hits, una base por bolas y una carrera anotada en un wild pitch. José Alvarado, por su parte, fue puro fuego en la novena, saliendo de un atolladero con las bases llenas para conseguir su primer salvamento de la temporada.
Los Phillies no brillaron con batazos largos o una explosión ofensiva, pero jugaron béisbol inteligente, paciente y bien ejecutado. Justo lo que necesitan mientras esperan la recuperación de su rotación y buscan consolidar su ritmo en casa.
Lo que viene
La prueba de fuego llega este viernes: serie contra los Dodgers de Los Ángeles, donde Jesús Luzardo subirá al montículo por los Phillies para enfrentar al japonés Yoshinobu Yamamoto, uno de los lanzadores más prometedores de la liga.
Pero hoy, el foco se queda en Taijuan Walker. Porque cuando el público de Philadelphia pasa del juicio al aplauso, es porque algo verdadero pasó en el diamante.
