DEPORTES MANIEL
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A veces, anotar una carrera en Grandes Ligas no solo es cuestión de talento, sino de paciencia y de resistencia. Este viernes por la noche, los Cincinnati Reds pusieron fin a una sequía ofensiva de 35 entradas sin anotar, una de las más largas en su historia. Sin embargo, no fue suficiente para evitar otra derrota: cayeron 3-2 ante los Milwaukee Brewers.
DE LA SEQUÍA, PERO NO DEL MAL MOMENTO
En la octava entrada, Christian Encarnacion-Strand conectó un elevado de sacrificio que permitió que TJ Friedl anotara la primera carrera del equipo desde hace más de tres partidos. Poco después, Jeimer Candelario trajo otra con un doble. Y aunque las carreras sirvieron para romper el hielo, el daño ya estaba hecho.
Con eso, los Reds evitaron igualar su propio récord de 45 entradas sin anotar, que data de 1941. Sin embargo, los 35 innings sin carreras igualan la cuarta peor marca de la franquicia.
UN EQUIPO GOLPEADO, DENTRO Y FUERA DEL CAMPO
La noche fue aún más complicada porque el equipo jugó sin su manager interino Terry Francona, quien se encuentra fuera por problemas de salud, y varios jugadores y miembros del cuerpo técnico fueron enviados al hotel tras presentar síntomas de una enfermedad no identificada.
“No sabemos qué tipo de virus es. Por precaución mandamos a algunos al hotel y esperamos que mañana estén mejor”, explicó Nick Krall, presidente de operaciones de béisbol.
A pesar de las ausencias, la mayoría de los titulares sí estuvieron en el terreno. El coach Freddie Benavides asumió las riendas desde el dugout.
DATOS QUE DUELEN
Los números no mienten: los Reds venían de tres derrotas consecutivas por marcador 1-0, algo que no pasaba desde 1960 con los Phillies. Además:
- Solo seis veces en la historia de MLB un equipo ha perdido tres partidos seguidos por 1-0.
- Ningún equipo ha perdido cuatro juegos seguidos por 1-0.
- La última vez que Cincinnati fue blanqueado en cuatro partidos consecutivos fue en 1931.
- La racha de 35 entradas sin anotar es la más larga para el club desde 1946 (cuando fueron 37 innings en blanco).
¿QUÉ SIGUE PARA LOS REDS?
Aunque la racha se rompió, la situación sigue siendo preocupante. El equipo necesita con urgencia estabilidad ofensiva, sobre todo ante una División Central que no da tregua.
Si bien la salud de los jugadores y cuerpo técnico es la prioridad inmediata, los Reds tendrán que reaccionar rápido si no quieren que abril se les escape de las manos.
Romper una racha de 35 entradas sin anotar no es motivo de celebración cuando la derrota sigue llegando. Pero al menos, los Reds demostraron señales de vida. Y en una temporada tan larga, a veces una carrera puede ser el primer paso para recuperar el ritmo.
