DEPORTES MANIEL
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El marcador dirá 3-2 a favor de México, pero lo que vimos en el SoFi Stadium fue más que una derrota para República Dominicana. Fue una presentación de respeto, de identidad y de carácter. Fue el debut soñado en medio del resultado adverso. Fue la chispa que encendió la esperanza de un país que hasta hace poco, no se atrevía ni a imaginarse en un torneo como la Copa Oro.
Y anoche, los muchachos no solo se imaginaron compitiendo compitieron. Sin complejos. Sin miedo.
El debut que asustó al gigante: Dominicana se ganó el respeto en la Copa Oro
Todo pintaba para una goleada cómoda de México. Tenían nombres con experiencia mundialista, historia copera y un estadio teñido de verde. Pero Dominicana llegó con otro libreto. No se dejó intimidar, rompió el molde y puso a temblar al gigante.
A los 51 minutos, Peter Federico González silenció al SoFi Stadium con el primer gol dominicano en la historia de la Copa Oro. Fue una jugada mágica: quiebre corto, remate seco y grito eterno. Un gol que no solo rompió la red, rompió también la narrativa.
Minutos después, Edison Azcona clavó el segundo con un zurdazo al segundo palo al 67’, dejando claro que lo de Dominicana no era casualidad: era carácter, talento y fuego caribeño en los botines.
Y cuando parecía que México iba a respirar tranquilo, Luiyi de Lucas mandó un misil al poste en tiempo de descuento. El empate rozó el milagro, y si hubiese entrado, nadie lo habría cuestionado. Porque Dominicana no solo jugó dominó tramos clave, pegó cuando debía, y forzó al gigante a sudar como pocas veces.
Más allá del marcador: lo que dejó Dominicana en su estreno
- Compromiso táctico: El equipo se paró con orden. Ni el primer tiempo deslucido ni los goles en contra desarmaron el plan. Hubo transiciones rápidas, presión en zonas clave y lectura táctica desde el banquillo.
- Valentía emocional: No se arrugaron. Ni el ambiente ni el rival los hizo bajar la cabeza. Hubo actitud, empuje y ganas de competir. Se lo creyeron. Y eso cambia todo.
- Identidad en construcción: Dominicana se presenta como un nuevo actor serio en la región. Ya no es solo béisbol. Ahora también es fútbol. Fútbol con nombres como Azcona, Dorny Romero, González, López, Ventura… Todos con ADN dominicano y con hambre de gloria.
Peter Federico: el nuevo símbolo
Nacido en España pero de padres dominicanos, Peter Federico González tomó el peso de la historia y la transformó en gol. Con apenas 21 años, el jugador del Valencia (cedido del Real Madrid) dejó su huella en la historia tricolor.
“Esto no es solo para mí, es para toda República Dominicana. Lo soñamos. Y ya es real.” — dijo emocionado tras el partido.
Con ese tanto, se convirtió en el primer goleador dominicano en una Copa Oro. Pero más que eso: se convirtió en símbolo de lo que viene.
¿Qué dijo México? Respeto total
“No fue fácil. Nos complicaron. Jugaron con intensidad y talento”, dijo el DT mexicano, Javier Aguirre. Y lo mismo replicaron los medios mexicanos que, aunque celebraron la victoria, advirtieron que Dominicana “jugó como selección grande”.
Eso, dicho por quienes dominan históricamente la región, vale más que mil titulares.
Lo que viene: no hay tiempo para celebrar
El grupo no da tregua. Dominicana enfrentará a Costa Rica y luego a Surinam, pero lo hace ahora con otra energía. Lo que pasó ante México cambia todo. No hay presión. Ahora hay convicción.
Y si con México se pudo soñar, con los próximos rivales se puede creer.
Un país que se atrevió
La República Dominicana no vino a participar. Vino a competir, a molestar y a soñar. Anoche perdió, sí. Pero también ganó algo más grande: respeto internacional, orgullo nacional y una generación que ya se sabe capaz.
Este equipo no quiere ser moda. Quiere ser modelo.
Y si siguen jugando así, quizás pronto dejemos de hablar de hazaña y empecemos a hablar de títulos.
